Los estudiantes de séptimo básico y segundo medio participan del Homenaje que realizó el Departamento de Castellano a uno de sus más destacados ex-alumnos.
José Donoso y la muerte
A José Donoso siempre le había aterrado la muerte, incluso pensar en ella, pero a pesar de eso escribió muchos libros que trataban de ella, como El obsceno pájaro de la noche, y aunque siempre pareciera estar feliz cuando inauguraba o estrenaba sus libros, la verdad es que, en muchas ocasiones, tenía que estar en el hospital, ya que se horrorizaba de las cosas que él mismo escribía.
A José Donoso le gustaba escribir sobre funerales y ancianos decrépitos al borde de tener el suyo, hablaba sobre locos, deformes y muchas otras cosas que aún nos parecen espantosas. Escribía historias trágicas que se desenvolvían de tal manera que parecían humorísticas. Él siempre escribía de la muerte con un marcado tono sarcástico, dando la impresión de que estaba completamente en paz consigo mismo y que no le temía a la muerte en absoluto, pero la verdad era que se estremecía al pensar en la suya.
Que Donoso hablara de la muerte con tanta naturalidad nos lleva a pensar que la consideraba como algo propio de la vida, algo normal, mostrar lo terrible con una sonrisa, es, quizás, más valioso que mostrar sólo la sonrisa. Por ello y muchas cosas más, José Donoso es un ejemplo a seguir para todos, por ello le dedicamos este día a casi 11 años de haberse enfrentado a sus miedos.
Mikel Villabeitía
A José Donoso siempre le había aterrado la muerte, incluso pensar en ella, pero a pesar de eso escribió muchos libros que trataban de ella, como El obsceno pájaro de la noche, y aunque siempre pareciera estar feliz cuando inauguraba o estrenaba sus libros, la verdad es que, en muchas ocasiones, tenía que estar en el hospital, ya que se horrorizaba de las cosas que él mismo escribía.
A José Donoso le gustaba escribir sobre funerales y ancianos decrépitos al borde de tener el suyo, hablaba sobre locos, deformes y muchas otras cosas que aún nos parecen espantosas. Escribía historias trágicas que se desenvolvían de tal manera que parecían humorísticas. Él siempre escribía de la muerte con un marcado tono sarcástico, dando la impresión de que estaba completamente en paz consigo mismo y que no le temía a la muerte en absoluto, pero la verdad era que se estremecía al pensar en la suya.
Que Donoso hablara de la muerte con tanta naturalidad nos lleva a pensar que la consideraba como algo propio de la vida, algo normal, mostrar lo terrible con una sonrisa, es, quizás, más valioso que mostrar sólo la sonrisa. Por ello y muchas cosas más, José Donoso es un ejemplo a seguir para todos, por ello le dedicamos este día a casi 11 años de haberse enfrentado a sus miedos.
Mikel Villabeitía
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